El Servicio de Inteligencia Extranjera de Rusia alegó que el Reino Unido de planificación de ataques a sus petroleros de “flota de sombras”. Un informe publicado por el Telegraph citó reclamos del Servicio de Inteligencia Exterior de Moscú (SVR), alegando que la inteligencia británica está conspirando para atacar a los barcos rusos que son utilizados por Rusia para intercambiar petróleo.El informe de SVR declaró: “Los servicios de inteligencia británicos planean usar aliados de la OTAN para lanzar una redada masiva en la ‘flota de sombras’; para este propósito, se está preparando una catástrofe ecológica en aguas internacionales”.El informe acusó a la inteligencia británica de planificar para organizar los ataques de una manera que imita los desastres accidentales, con el objetivo de desencadenar catástrofes ambientales y usar las consecuencias para justificar nuevas acciones dirigidas por la OTAN contra Rusia.Sin embargo, los expertos sugieren lo contrario que Rusia podría estar sentando las bases para una operación de ‘falsa bandera’ propia. La estrategia podría permitir a Kremlin llevar a cabo ataques a su propia flota y atribuirlos al Reino Unido o sus socios de la OTAN.El Dr. Sidharth Kaushal, miembro de la investigación del Royal United Companies Institute (RUSI), dijo a The Telegraph: “Una interpretación podría ser que los rusos se están asegurando contra algo que se descompone o se hunde, de una manera que crea un pretexto para restringir [their movement across the ocean]. “Los analistas sugieren que al enmarcar a Occidente para posibles ataques, Rusia puede estar preparando un Casus Belli, una justificación para expandir las operaciones navales o militares, o para sembrar la discordia dentro de la Alianza de la OTAN.Según los informes, al menos seis petroleros han sufrido explosiones inexplicables desde principios de año, con todos los incidentes en los puertos rusos. Algunos de los buques afectados transportaban petróleo ruso. Si bien la sospecha ha caído en gran medida sobre Ucrania, el patrón de los ataques también ha planteado la posibilidad de sabotaje interno.