La administración Trump busca en silencio alternativas a SpaceX para su ambicioso sistema de defensa de los misiles de Golden Dome, semanas después de la grieta pública entre los dos, según la agencia de noticias Reuters.Hasta hace poco, el antiguo SpaceX del aliado político de Trump, Elon Musk, period el principal contendiente para ayudar a construir el Golden Dome, un escudo de misiles que Trump ha promocionado con frecuencia en los discursos.Según el Wall Road Journal, los asistentes de Trump han lanzado una nueva revisión de los contratos federales de SpaceX, con la esperanza de encontrar posibles gastos excesivos o lagunas. Pero la nueva revisión no ha producido mucho. La mayoría de los contratos existentes de SpaceX, con la NASA y el Pentágono, se consideraron demasiado críticos para manipular.A pesar de las tensiones, el gobierno de los Estados Unidos permanece profundamente vinculado a las empresas de Musk. Con los años, SpaceX y Tesla se han beneficiado de miles de millones en fondos públicos y contratos. Aún así, el equipo de Trump está explorando si los competidores, incluido el proyecto Kuiper respaldado por Amazon de Jeff Bezos, pueden reemplazar a SpaceX en futuros proyectos como Golden Dome. Curiosamente, el propio Musk ha dicho que SpaceX no está interesado en trabajar en el escudo de misiles. En abril, publicó en sus redes sociales: “SpaceX no ha tratado de ofertar por ningún contrato a este respecto. Nuestra fuerte preferencia sería mantenerse enfocado en llevar a la humanidad a Marte”.