El motor Turbofan F135 de Pratt & Whitney potencia cada variante del F-35 Lightning II (lo que lo convierte en uno de los 8 aviones de combate con motores Pratt & Whitney que los alimentan) y es el motor de reacción de combate más avanzado en funcionamiento. Desarrollado a partir del F119 que impulsa el Raptor F-22, el F135 se adaptó específicamente para los exigentes conjuntos de misiones del F-35. Ofrece más de 40,000 libras de empuje e integra el sistema de management del motor más avanzado del mundo, lo que le da a la aeronave una agilidad y una velocidad excepcionales. Con el manejo firmante y térmico y el monitoreo integrado de la salud pronóstica, el F135 es inteligente y adaptable.
Este motor admite las tres variantes F-35: despegue convencional (F-35A), despegue corto/aterrizaje vertical (F-35B) y portadores (F-35C), permitiendo compartir piezas globales, logística simplificada y cambios de mantenimiento más rápidos. La comunidad también permite un rendimiento constante en todas las plataformas, ayudando a los aliados y al ejército estadounidense estandarizar y escalar operaciones.
El F135 entró en servicio en 2009 y ahora ha superado un millón de horas de vuelo. Respaldado por una pink de sostenimiento madura en 32 bases y 12 barcos, apoya la preparación de la misión de los aeródromos domésticos a los transportistas desplegados hacia adelante. A medida que evolucionan las amenazas modernas, el Pentágono confirmó en 2023 que, en lugar de reemplazar el F135, actualizaría el motor a través del programa de actualización del núcleo del motor de Pratt & Whitney (ECU). Este camino ofrece un mejor empuje y gestión térmica sin el costo o riesgo de integrar una planta de energía completamente nueva como la XA100 de GE. En pocas palabras, el F135 está aquí para quedarse, y solo está mejorando.
Un camino más inteligente hacia el futuro
La decisión del Pentágono de respaldar la actualización del núcleo del motor F135 sobre un nuevo motor adaptativo como el XA100 de GE (un motor de vanguardia que podría alimentar los aviones de combate de sexta generación de Estados Unidos) no se trataba solo de presupuesto; Se trataba de practicidad. El F135 ya impulsa más de 1,100 F-35 en más de 20 naciones aliadas (aquí hay más detalles sobre qué países los vuelan y cuántos tienen). Reemplazar ese motor por completo requeriría cambios significativos en el fuselaje, reescrituras logísticas y miles de millones en nuevas inversiones. En contraste, la ECU es una actualización de entrega. Preserva la infraestructura existente y funciona en todas las variantes F-35.
La ECU aprovecha más de una década de investigación de propulsión, incluidos los aportes de programas como el Programa de Transición de Motores Adaptativos (AETP) e Iniciativa de reducción de quemaduras de flamable de la Armada. Ofrece un mayor empuje, una mejor gestión térmica y una mejor eficiencia del flamable, todo sin necesidad de rediseñar la aeronave. El plan de Pratt & Whitney mantiene los costos bajos y los altos de la confiabilidad mientras construye un puente hacia la tecnología de propulsión de sixth Gen.
El F135 actualizado habilitará el conjunto de capacidad completo del Bloque 4 del F-35, que incluye guerra electrónica avanzada, sensores y armas que exigen más del motor. Según Pratt & Whitney, la ECU se puede ajustar para 2028. Mientras tanto, innovaciones como la herramienta de apilamiento inteligente en la Base de la Fuerza Aérea Tinker, que aceleró el ensamblaje del rotor en un 75%, tienen horas de hombre y la precisión de salida mejorada. En resumen, el F135 es más que un motor. Es una plataforma: probado, evolucionando y aún entregando para el avión de combate más avanzado del mundo.